Después de un viaje profundo, creativo y honesto, Isabel Margarita Pérez presenta una nueva etapa de su marca, un retorno a la esencia, al trabajo hecho a mano con amor y a la creación de piezas únicas, nacidas de la conexión con la tierra, sus colores y sus texturas.

Hoy, Isabel Margarita tiñe sus lanas con el alma, con una voluntad renovada y una visión clara. A su experiencia se une la de Alpaca Betania, en una colaboración que da vida a materiales bellísimos.

Juntas desarrollan hilados teñidos artesanalmente, alpaca, merino y corriedale, fibras nobles trabajadas bajo altos estándares de calidad y respeto por el proceso natural.

Este nuevo camino es un desafío creativo y también un acto de amor, volver a hacer lo que le apasiona. Cada madeja lleva el sello de su historia, su mirada y una manera única de comprender el color y la materia.